(entrevista en Donde comienza el camino, 2000)
"Se había creado un pequeño margen: llega Frondizi, hay la posibilidad de hacer pequeñas cosas... siempre por los intersticios, siempre por las grietas. La Universidad Nacional del Litoral, que había defendido bastante duramente, hasta donde pudo también, su autonomía, recupera los famosos principios de la Reforma Universitaria del '18. Tenía en Extensión Universitaria un Instituto de Sociología... ahí había una doctora Angela Romera Vera, una personalidad brillantísima y con mucha fuerza, una feminista avant-la-lettre... Y a través de esa pequeña grieta, el cine entra en la Universidad, rechazado por la mayoría del cuerpo académico que no comprendía ni aceptaba esto que se estaba proponiendo. No obstante, la cosa empezó a caminar, hubo una respuesta muy grande de la gente joven. A mi primer seminario asistieron 120 muchachos y muchachas, y eso decretó de alguna manera que la cosa se llevara adelante.
"Y así nació el fotodocumental, que a su vez heredaba una experiencia que había hecho el Neorrealismo italiano... pero mirá, para los italianos cuando ya no podían decir lo que querían decir a través del cine, empezaron a publicar en la revista Cinema Novo estos fotodocumentales. Para nosotros, en vez del ya, estaba el todavía: nosotros no podíamos todavía decirlo con cine. Esto es hermoso porque da también la dinámica de la historia cuando vos, frente al destino, intervenís con tu aporte... sos también un elemento casual-causal para modificar el destino. Y en ese caso, faltos de elementos, replegamos sobre las maneras más accesibles, más humilde y más económica, que es el fotodocumental: cámara fotográfica, lápiz y papel.
"Se consigue la primera cámara, un grabador de aficionado de pésima categoría, causa del pésimo sonido que tiene que no se entiende, causa de la contradicción de un cine doblado en su propio idioma... Porque Tire Dié está hablado en castellano, y de alguna manera las voces de Francisco Petrone y María Rosa Gallo que son las que lo doblan hablan también en castellano. Lo que pasa es que el primero era ininteligible, pero yo no podía eliminarlo del todo, porque era quitar la autenticidad del documento, autenticidad de palabra pero también de textura, de sentimiento, de todo lo que implica la voz hablada, y por otra parte la necesidad de que esto que estaban diciendo pudiera ser entendido... Imaginate, en la medida en que el film se presentaba como un film encuesta.
"Fuimos con nuestro equipo, con las cámaras y con lo poco que teníamos al Bajo del Tire Dié... y nos sacaron a pedradas, nos pararon en el confín del barrio. Ahí entendimos que habíamos equivocado todo, que no era esa la manera de la aproximación, de la mejor o de la primera aproximación... Nos reunimos y discutimos, estábamos doloridos, nos parecía una incomprensión, discutíamos, pero también intuíamos que si alguien estaba equivocado éramos nosotros, porque íbamos a un territorio que queríamos conocer. Decidimos volver, sin cámara ni nada, a hacer lo que realmente teníamos que hacer y que era el real motor de todo este trabajo: conocernos. No conocer-LOS, sino conocer-NOS. El conocimiento tenía que ser recíproco.
"Yo te digo: yo salí completamente cambiado de Tire Dié. Tire Dié es un film que hemos hecho para que la gente salga del cine cambiada, el mismo espectador que sale no tiene que ser, o no puede ser, o deseamos que no sea el espectador que entró... Eso que después yo lo formulé teóricamente, lo pude hacer con un mínimo de autoridad porque empezó por mí. Este que salió de hacer el Tire Dié no era el que había entrado a hacer el Tire Dié. Y esa es una de las cosas que nunca dejaré de reconocer, ni mucho menos de agradecer a una película como Tire Dié.
"Y eso creo que de alguna manera nos pasó a todos los que trabajamos en la película. Es decir que si la película puede incidir en un cambio de la realidad, ese cambio no podía ser de otro modo que no nos cambiara a nosotros en primer lugar. En primer lugar.
"Pero al final, el cuento termina, cuando ya estamos al final de la filmación, dejamos todos nuestros equipos -los mismos equipos que habían servido para que nos apedrearan cuando llegamos- en los ranchos de los Tire Dié. Ellos cuidaron todo hasta el último momento. Ellos velaron para que la película se pudiera terminar."
Para ampliar sobre este tema:
Articulo. Tiré Dié (un sueño con los ojos abiertos) - De Birri, Fernando
Articulos. Manifiesto de Santa Fe y Tire Die - De Birri, Fernando
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